AHORA O NUNCA.

Parece ser que hay una edad, próxima a los cincuenta, en la que algunas personas sufren un desequilibrio emocional, vital, trascendental que les empuja irremediablemente a plantearse una cuestión: Ahora o nunca. Sé de algunos que les da por correr y empiezan a entrenar y no paran hasta que no consiguen hacer la Behobia - San Sebastián, aunque lleguen medio muertos. Otros se dan cuenta de que el sexo que les gustaba no era el de toda la vida, o de que con quien compartían cama, o baño, no era para siempre, o se meten en la redes sociales (facebook, twitter, linkedin…) y se obsesionan hasta que su médico les tiene que recetar FrenaRed complex (que va bastante bien). Hay quien se apunta al coro del pueblo y, como nunca han cantado y su oído ya no tiene posibilidades de mejora, el director les deja en la cuarta fila porque le dan pena, haciendo playback, eso sí.

Yo quería hablarles de Goio Arrieta, que en este brete del que hablamos, un día debió decir también: Ahora o nunca. A Goio le conozco de toda la vida, estudiamos juntos en el colegio, podíamos haber sido de la misma cuadrilla, cosa que hubiera sido, ahora que sé de lo que es capaz, todo un honor y un privilegio para el que suscribe. Pero la vida es así y resulta que Goio es de Aretxabaleta y para los que somos de Mondragón, Aretxabaleta es un pueblo lejano y exótico, tanto es así que, tradicionalmente, los de Mondra sólo viajamos a ese pueblo en carnavales. Pero como la vida da siempre segundas oportunidades, este verano nos hemos reencontrado en Cataluña, y ha sido gracias a que nuestras respectivas hijas sí que son amigas. Supongo que Goio un día pensó que tenía algo que decir y que sabía cómo hacerlo y en ese, ahora o nunca, montó un espectáculo en el que aúna humor, sentimientos de intenso amor a la familia y a nuestra tierra, música y un mensaje limpio de que aquí cabemos todos. Y además, él solo, y como si llevase sobre un escenario toda la vida. Me aventuro a decir que si hubiese empezado en esto hace treinta años, ahora les solucionaría un problema a los de Hollywood, que se han quedado sin presentador para la gala de los Oscar. Pide a los que asisten que no desvelemos su espectáculo “Sustraiak han dituenak” contándolo por ahí, yo no diré más, sólo, que merece la pena.

Goio es del sesenta y uno, como un servidor y como todos los que nos vamos a juntar el 26 para celebrar la quintada, a quienes aprovecho para mandar un cariñoso saludo y recordarles que “ahora o nunca”.

Y os tengo que dejar, que me he apuntado a una novedosa actividad: “Parapenting Indignation”, que consiste en saltar en parapente desde la torre de Iberdrola de Bilbao y llegar hasta la puerta del Sol, en pelotas claro. Lo que ocurre es que la distancia es grande, incluso mayor que la que hay entre Mondragón y Aretxabaleta, por eso que muchos aterrizan en La Rioja y aprovechan para visitar unas bodegas durante uno o dos meses. Bueno, que me voy, ahora o nunca, va por ti Goio.